Cosmos

Estábamos sentados tomados de las manos en la orilla del mar mirando las estrellas, por un momento ese espectáculo de misterio se nos vino encima de nosotros.

ya no había nada, no había nadie, nuestro alrededor había desaparecido. No estábamos mas sentados en la orilla del mar; nuestros cuerpesitos habían desaparecido. Solamente estaban ahí, nuestras dos almas, jugueteando por todo el cosmos, ya no había misterio, cada una danzaba al ritmo de la otra, sentían que se pertenecían, la energía era correspondiente, estaban donde tenían que estar. Volvimos a la tierra, el mar estaba frente a nosotros otra vez, nuestras manos seguían unidas. nos miramos en silencio, sonreímos, eramos parte de las estrellas. El cosmos había respondido todas nuestras preguntas.